

GRACIA
​
DIOS NUNCA HA ESTADO ALEJADO. Dios nos conoce mejor de lo que nosotros nos entendemos a nosotros mismos. Dios siempre ha sabido por qué el hombre hace lo que hace. En la Biblia Dios nos ve viviendo nuestras vidas con una brújula rota. El lenguaje de Dios en la Biblia es uno que se duele por las decisiones que hemos tomado y que nos han hecho daño a nosotros mismos y a los que nos rodean. El tomar como normal este bajo concepto de la vida es lo que le apena.
​
Dios revela que es imposible para nosotros cumplir con el propósito original para el cual fuimos creados. Fuimos hechos para amar perfectamente, ser perfectamente buenos y perfectamente en amor con Dios. Todos fallamos en esto, y ninguno de nosotros puede hacer nada para que esto sea así. Desde el nacimiento, nadie puede trabajar o esforzarse para cambiar su propio corazón y dejar de pecar. Simplemente no podemos parar y nunca podremos apartar el pecado de nuestro corazón. Naturalmente estamos separados de Dios aquí en la Tierra y por siempre en la eternidad. Dios sabía esto, y DIOS SABÍA QUE ESTÁBAMOS SIN ESPERANZA.
​
Pero Dios decidió hacer algo. Dios decidió hacer lo que nosotros no podíamos hacer. Dios decidió venir y salvarnos. El inicio de la Biblia (Antiguo Testamento) trata de cómo Dios venía y salvaba al mundo entero a través de un salvador que podría ser Dios mismo. Jesús vino y cumplió todo lo que en el Viejo Testamento se prometió. Jesús sufriría y moriría para perdonarnos de todos nuestros pecados (Isaías 53). Jesús nos daría un nuevo corazón y nos cambiaría a través de Su Espíritu Santo en nosotros (Jeremías 31). Salvándonos, Jesús satisfaría nuestras almas y nos daría descanso y paz para con Dios (Isaías 55). Jesús traería el mensaje y la esperanza de salvación para todo el mundo (Génesis 12:2, Mateo 28:16-20) Jesús volvería e iniciaría un completamente nuevo mundo, lleno de justicia, paz y vida eterna (Isaías 25:8 ; Isaías 11:1-9). Para recibir esta gracia y todas las promesas que Dios da, todo lo que tenemos que hacer es PEDIR A DIOS EN FE QUE NOS RESCATE (Efesios 2:1-10). Esta fe debe ver nuestras vidas tal como es y empezar a ver que hemos pecado contra Dios y que necesitamos volvernos a Jesús para sanarnos y salvarnos. A todos los que LLAMAN a Su puerta, Jesús les promete abrir y mostrarnos Su amor.
​
P. ¿Sabías que Dios conoce lo peor de ti y aun así escogió sufrir la muerte para darte la oportunidad de ser amado y perdonado para siempre?
​
P. ¿No es extraño que el Dios de la Biblia no está buscando religión y buenas obras sino sinceridad y relación?